El Parole Humanitario en EE.UU. continúa siendo una de las vías legales más importantes para ciudadanos de Cuba, Haití, Nicaragua y Venezuela (CHNV) que buscan ingresar de forma temporal al país.
Este programa, implementado por el Departamento de Seguridad Nacional (DHS) y el Servicio de Ciudadanía e Inmigración (USCIS), permite una estadía de hasta dos años, siempre que se cumplan los criterios humanitarios y económicos exigidos.

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El papel del patrocinador y el Formulario I-134A

El patrocinador es la pieza central del proceso.
A través del Formulario I-134A, debe demostrar solvencia económica suficiente —al menos el 125% del nivel federal de pobreza— según las Guías de Pobreza 2025.
Además, debe contar con un estatus migratorio legal y superar verificaciones de antecedentes que incluyen controles contra la trata de personas y la explotación laboral, reforzando la integridad del programa (fuente: DHS/USCIS).

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Requisitos esenciales para los beneficiarios

Los solicitantes deben encontrarse fuera de EE. UU., poseer un pasaporte válido y cumplir con los protocolos médicos y de vacunación exigidos por los CDC.
Una vez aprobado el patrocinador, el beneficiario recibe una autorización de viaje anticipada y completa su registro mediante la aplicación CBP One, antes de presentarse en un puerto de entrada autorizado (fuente: USCIS.gov).

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Limitaciones y motivos de rechazo del parole

El Parole Humanitario en EE.UU. no aplica para personas dentro del país ni para quienes ya participan en programas migratorios especiales.
USCIS puede negar solicitudes si detecta riesgos a la seguridad nacional, antecedentes penales o la existencia de alternativas legales como visas consulares.

Cómo iniciar el proceso en línea

El patrocinador crea una cuenta myUSCIS y presenta el Formulario I-134A.
USCIS revisa la capacidad financiera y los antecedentes.
Si se aprueba, el beneficiario completa su registro en CBP One.
Finalmente, se realiza la inspección en un puerto de entrada, donde se otorga el parole por dos años.

Estas medidas buscan mantener la transparencia y garantizar que solo los casos humanitarios más urgentes sean aprobados.

El Parole Humanitario en EE.UU. representa una herramienta vital para quienes buscan protección y oportunidades, pero también exige un cumplimiento riguroso de requisitos económicos y legales.
Informarse correctamente es clave para evitar errores y rechazos durante el proceso.

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